14 de agosto de 2017 (Nueva York, NY) - Hoy, el Hispanic Federation emitió la siguiente declaración en respuesta a la violencia perpetrada por supremacistas blancos en Charlottesville, Virginia este fin de semana:
"El Junta de Directores, el personal y la red de organizaciones latinas de base del Hispanic Federation condenan enérgicamente la violencia desatada este fin de semana por supremacistas blancos en Charlottesville, Virginia. Estamos desconsolados por las muertes de Heather Heyer y de los policías estatales de Virginia H. Jay Cullen y Berke M.M. Bates. Nos unimos a sus afligidas familias para recordar y honrar su sacrificio y servicio.
"El mitin y la marcha "Unite the Right" fueron una vergonzosa muestra de nacionalismo blanco diseñada para exacerbar las tensiones raciales y aterrorizar al pueblo estadounidense. Los organizadores del evento, líderes del llamado movimiento "alt-right", son herederos de una tradición de violencia racial y terrorismo que sigue causando graves daños a nuestra nación.
"Si bien nos alentó ver la enérgica condena de la violencia nacionalista blanca proveniente de líderes de ambos partidos, nos preocupó profundamente la declaración equívoca del presidente Trump inmediatamente después de los ataques de este fin de semana. Dados los vínculos estrechos y documentados entre altos cargos de la administración y el movimiento "alt-right", el presidente tiene el deber especial de asegurar a la nación que la ideología y las políticas racistas del movimiento nacionalista blanco no son bienvenidas en nuestro gobierno. Lamentablemente, el presidente Trump no nos ofreció liderazgo frente al caos. Su intento de establecer una equivalencia moral entre los supremacistas blancos y los contramanifestantes fue profundamente erróneo e insultante. En la lucha por la expansión y la protección de los derechos civiles solo hay un bando: el de la justicia.
"Pedimos al Presidente que se distancie completa y públicamente de aquellos asesores y partidarios que defienden las ideas y prácticas de la supremacía blanca, y que exponga las estrategias que su administración pondrá en marcha para luchar contra estos grupos. Estados Unidos no puede permitirse dar cuartel a aquellos cuya visión de la nación está ligada a peligrosas ideas de odio y violencia. La noche de las elecciones, Donald Trump prometió que sería el presidente de todos los estadounidenses. Con casi siete meses de mandato, ya es hora de que empiece a actuar como tal."
